Fedra Spinelli


Fedra Spinelli


nació en Buenos Aires, Argentina, en noviembre de 1970. Es poeta y periodista. Exploró también por la antropología, brevemente por artes combinadas. Hizo teatro, performances, danza y fotografía. En poesía tiene publicado «Vietnam» (edición artesanal); «Digo bosque y otros poemas» (ediciones del Dock); "Delta" (Ediciones la mariposa y la iguana, 2013).

Su blog es cotidianapoesia.blogspot.com


Delta

"La corriente arrastra objetos, los manipula, los moldea, los transporta, los pasea. Ella decide esos destinos de cementerio para hojas, ramas, botellas, restos de casa o embarcaciones, cosas que la gente abandona.
Ella pensó que hay dos tipos de objetos, los que flotan y los que se hunden. Mientras ve el agua discurrir, crecer, subir la costa y avanzar a tierra. Masa duplicada (aumentada) de agua por la lluvia. Mientras observa el brillo sinuoso de esa danza que hace el río. Intenta hacer una lista de lo que queda en la superficie, lo liviano; y lo que se sumerge, lo que pesa. Trata de descubrir si lo que flota está vivo y lo que se hunde muerto. Pero no puede, no le sirve ese pensamiento. Le preocupa no poder saber qué tipo de cosa es ella. Si se va a ir al fondo o va a rodar a la deriva. Pero ve que el fondo también es una deriva, que si se hunde está viva, que el peso de algo se define en la corriente."









En este libro los hechos se superponen, la cronología (que “nada explica”), aparece compactada y en fragmentos, con la confusión de los que no comprenden lo que tienen en las manos. Y sin embargo hay una progresión de viaje que también es un viaje adentro, que se multiplica, se ramifica como un delta sin dejar de formar parte de un mismo río: los empuja una misma corriente.
Entonces, está el viaje físico al Delta del Paraná, el viaje interno, el viaje soñado por otros, que brindan los libros.

Lo “salvaje”, “eso, lo inevitable”, que desborda e irrumpe puede verse a lo largo de todo el poemario. Está en lo cotidiano, a pesar de las listas de hacer las compras, en la cabaña del Delta, en la propia sombra junto al río. Entre el miedo y la fascinación, no se comprende lo que arrastra el fondo, todo es opaco. El movimiento es simultáneamente una huída y una búsqueda: “irse para encontrarse”. Un pedacito de tierra, una isla, la metáfora del cuerpo, algo que funcione como ancla frente a la deriva del sentido, la deriva de las aguas, la metonimia que hace de los cuerpos objetos inanimados en la corriente.

“La pregunta sobre el amor, llevó a la pregunta sobre el ser”, dice Fedra. Sólo que el verbo ser casi no aparece en todo el libro y el que no deja de reiterarse es el verbo “estar”. Tal vez porque la existencia no se comprenda más que estando, en los lazos que se tejen con la palabra del otro -“entonces, lucha”-, dice el padre y hay algo que se detiene y hace pie.
Leticia Hernando 

Dafne Pidemunt


Dafne Pidemunt

Nació en BsAs en el año 1977. Realizó estudios de cine y video en la Escuela Municipal de Cine y Video de Lomas de Zamora. Participó de diversos ciclos literarios. Realizó talleres de escritura en La casa de la Poesía. entre otros.
Tiene publicado «El juego de las estatuas», ed. Yügen, 2004. reeditado por «Ediciones la mariposa y la iguana», 2010 y "La avidez del silencio", Ediciones la mariposa y la iguana, 2013. Participó de la antología de poetas argentin@s cotemporane@s «Si Hamlet duda le daremos muerte» (Libros de la talita dorada, 2010).
Actualmente se encuentra estudiando el profesorado de Lengua y literatura en el Instituto Superior J.V. González, dando clases de escritura creativa y desarrollando el proyecto editorial «Ediciones la mariposa y la iguana» junto a Leticia Hernando.

Aquí el video de la presentación de "El juego de las Estatuas" a cargo de la poeta Inés Manzano y la entrevista a la autora. 
Y dos poemas, traducidos al francés por Cecil Guivarch.

contacto: dafne_pidemunt@hotmail.com 

El juego de las estatuas



La avidez del silencio





Madre

El consuelo de escribir.
Mi madre se emborracha. Una y otra vez la asesino. Muerta, resucitada, continúa suicidándose. Pienso en la música, trato de no llorar, la máquina de escribir repite los mismos errores en la misma tecla, mi madre tipea. A lo lejos yo la observo; vaya coincidencia, al igual que la máquina yo repito siempre los mismos errores que mi madre, en las mismas situaciones. Me emborracho, me asesinan, resucito, me suicido.
Y mi madre a la par mía vive con el consuelo de escribir,
imitándome.
*

Madre II parte

Como una daga alzada en la oscuridad
es la madre que tuve y que tendré.
Debo aceptar que no es la madre que elegí,
ya no creo en el Karma.
(El conformismo no es mi suerte)
Pero si la vieran haciéndome la comida
o arropándome en las noches,
entenderían por qué la perdoné
de hacerme madre desde mi niñez.
*

Recuerdos del viajero

Es el romance del hombre solitario.
Un recuerdo, apenas, del silencio de los hombres
en la letanía que baja desde el cerro
con los pies sucios y morenos,
con los hombros cansados y el cajón.
(Hemos visto bajar cajones.
Hoy nos refugiamos en la vida para no recordar)
Y cuando el cansancio es almático
lloramos por el muerto,
pero si lo que duele es el cuerpo
el peso del cajón supera al de los años.
(Hemos chocado las manos
con aire de condolencia
hacia alguien que desconocemos)

Yo,
que nunca he visto un cuerpo inanimado
me visto de flores marchitas
para acordarme de la muerte.
*

Ella no me ama a mí.
Ella ama mi palabra, mi juego.
Poeta nacida de vientre judío.
Juego con una religión desconocida,
le digo en idish cosas que no entiendo
en castellano.
Lo que sea por otra noche en sus brazos.
Lo que sea por otro beso en mis pálidos labios.
-¿Querés palabras?- le dije.
Jamás se detuvo en las palabras que no podrían
nunca bucear por su sexo
como lo hace mi física lengua.
-¡Más poemas pequeña!, ¡Más poemas!-
me exigía cada noche al dormirse en mis brazos
-O se ama o se escribe.
Amor y literatura no deben tocarse-
Ella sabe y no le importa.

Poeta nacida de vientre judío.
Le invento palabras
En todos los colores, sabores y posibles conjugaciones.
Juego con la facilidad del lenguaje
en mi lengua.
(siento el jugo derramándose en mi boca,
desde mi lengua poética hasta mi física lengua)

-Si querés un buen poema no me ames-
Ella sabe y no le importa.

Y digo:
¿me ama? y digo quién sabe, y quién sabe qué.
Y digo: ¡no me ama!
Y digo: ¡es hermosa!
Me salgo de ella.
Me olvido de amarla.
Y … ahhhhhhhhh
suspiro mediante
comienzo el poema
que diré esta noche.
*

Los dioses ya no amparan mi caída.
Los días cálidos de enero
se han trasladado
a otras costas de espuma.
(cae el sol)

Otras muertes nos aguardan.
Ya no las alegres muertes de la infancia
-La hormiga aplastada por el juego-
Espinas caen en Rilke
y amenazada por el tétanos, la rosa.
               (cae el sol)
-La hormiga aplastada por el juego-

Entraremos a la muerte
como vinimos a la vida,
por entre las piernas de algún demiurgo.
 *

Podríamos refugiarnos en la espera.
Ya no habrá alas de ángel
ni de pájaro herido en la torre más alta.
Ya no cobijaré mis lastimados labios
en la sal de colosales mares.
Ha caído toda sublime creencia,
aún la de los muertos.

Podríamos refugiarnos en la espera.
Nos vestiremos de gala
para mirar al cielo.
Recogeremos el pequeño motín de sensación.
Lo cuidaremos hasta el alba.

-Son hermosos los trofeos
que la espera me ha revelado.-
 *
  
Para acunar a la hija que no tuve
te escribí palabras
te suspiré un verso
te llamé a gritos,

para acunar a tu niña
para buscar mi infancia
te quebré las piernas y abrí tus venas

Estás ahí, lo sé,
escucho cómo llamas con campanas
de adiós a la niñez
mientras sigo soplando panaderos

—Poesía,
pides un costo demasiado alto.
 *

Me absuelvo de culpas, a saber:
no cumplir las promesas
no cortar el cordón umbilical
ni el césped
no amarte como merecías
llorar mucho, demasiado quizás
masticar las palabras
tragarlas hasta que me trabaran la lengua,
ser trabalenguas en tu boca

-perdono al gato hambriento
que comió una paloma.
*

Yo quiero ser al jazmín
lo que del amarillo queda
guardado en un libro.
Déjame ser recuerdo,
quiero la libertad agazapada
del cáliz de rocío.

Busco a tientas la sombra en la claridad.
Nada lleva tu nombre.

Hago la simpleza de la rosa
al  caer del rocío:
me abro en mil partes
y sangro.
Desmesurada
me rompo
al igual que la flor
con el viento.

-Te ofrendo esta rosa,

déjala  devorar tu grito.
*

Si se pudiera pedir el sol como se pide un café.

Desayuno a solas con el tiempo
(implacable el tiempo, a la hora de respirar)

Te digo palabras para que dejes de creer en mí:
digo abejita succionando una flor,
luna en tu sombra,
agua que te quema,
digo canción.

Te entregaría mi sangre a cambio de tus miedos.

-A veces el amor
no es asunto de los muertos.
*





Catalina Boccardo


CATALINA BOCCARDO


Argentina, 1961. Publicó «el jardín santo» (Ed. en Danza, 2011), y «territorios», (ed. Del Dock, 2012).
Participó con su microrrelato «Sangrar» en un libro objeto (4ºEd.), Foro de ediciones contemporáneas del Museo de Arte Carrillo Gil; (c)acto ed., México, 2012. En 2013 publicó «elementos», «mangos» y «bailar» (cuadernos de la Mariposa y la Iguana). Su poesía también aparece en blogs del país y el exterior, en fanzines, revistas y en las antologías: Gente de Lunes y Festival en la Escuela.
Invitada como poeta y abogada, por la S.E.A. en la 38º Feria Internacional del Libro, en la mesa «Femicidio. Asesinadas por amor», 2012
Incursiona en el collage y la fotografía artística, y ha participado de muestras colectivas y en unamuestra individual en el Centro Cultural Oliverio Girando. Muchas de sus fotografías se encuentran en varios blogs y revistas digitales. Realizó el arte de tapa de diversos libros. Fue mención de Honor en el Concurso Internacional de Fotografía Erótica, 2014, convocado por Club fotográfico Lanús y Te mataré Ramirez.
Tiene en preparación la serie de cuadernos de fotografías «Aguas».
Fotografías suyas aparecen en: http://www.pinterest.com/catalinaboccard/ y «A destiempo la nada» en Facebook.



FIGURA UNO


las mujeres tienen sus piernas rotas
o se les cae un ojo y nacen flores diminutas


yo construí esas ideas
mis propios ojos suelen ser trampa
metal de la tijera

quién desea
una clave
en el fondo
quién puede humanamente astillar papel


reconfigurar aristas
matarse el centro


la física

desaparición por el corte
*



mangos


                                                                                 Esos labios besados en otro país en otra raza en otro planeta
                                                                                         en otro cielo en otro infierno
                                                                                                        ENRIQUE MOLINA
cielo en otro infiernoesos labios besados en otro país en otra raza en otro planeta en otro
cielo en otro infierno


1
una jauría de perros apareció mientras recogías mangos del huerto. y esa posibilidad de sufrir bajo los dientes.  el paso rápido algunos frutos entre las manos hasta la casa vieja.
más tarde enviaste imágenes, mangos en un plato, cubiertos con chile, a punto de mordida.
tu boca, pensé. tu lengua aún en tu país, sin los templados reclamos de la distancia.
sea torridez, pensé.

2
el poblado más cercano está a unos kilómetros.
quizá regresés a ese lugar a escarbar los recuerdos de la tierra. me explicás, filósofo niño. buscás el sentido de la vida  con tus manos tus ojos. pasado y presente de soledad, de quietud extraña, no deambulan máquinas que quitan el tiempo.
comienzo a desear la propiedad de tus observaciones.
allí, existe. ha existido antes de nosotros. seguirá el camino de los vivos y los muertos después. fenecerá su cáscara intacta. huesos que busca tu antropología. viejas cerámicas de aquellas muchachas del yucatán.
allí, la huerta de siembras fuertes. los cuerpos piden y se fagocitan. se hacen el sexo con gruñidos de jabalíes. repiten las generaciones. rituales del mundo ya perdido.
a destiempo. estas coordenadas atemporales.
mis criaturas sueltan el polvo de sus bocas. salen a pastar alrededor. voltean su cabeza para observarte caminando hacia la casa. en el frente hay una sillón donde tu abuela se mece, casi ciega. la del pelo en lluvia. sus huaraches y la mantilla. de la que siempre hablarás.
arrojás los frutos sobre la mesa. vas a buscar algo dentro. mirás desde lejos pensando en contarme tus sabores. yo espero desde mis papilas. soy ese animal que te comparte.
cuándo viajaré humana. tocar esa pelambre. y las hojas de agua verterás. hervíboros.

3
nadie me había enseñado que la distancia es nada.
puede absorber el aire dentro de los pulmones. flota en las células. o puede ser un protón moviendo la materia.
dentro de esa pequeña gran nada tenemos sexo.
de algún modo.
bajamos los párpados para no voltear pupilas al día porque allí no estaremos.
fuga de los perros sin dueño.
vos caés. la grieta. el hueco. el pozo volcánico.
traspasa la obsidiana. las piedras culturales.
juntos huimos arrancamos el sabor eléctrico de los mangos. trituramos palabras cartas damos de comer.
y quisieras otra cosa. un elemento para cavar. introducirte. buscar la minería. la fuerza de gravedad.
recibo tu peso. el lazo crudo en mi cuello. me domestico bajo tus piernas. presiento  temporalidad. los pasos acompasándose. después.

4
tu pregunta es un grito. atraviesa la huerta.
gritar a los demás que escapamos. no sé si sea el peligro de mordeduras hambrientas.
la tarde se resbala en el barro. los estertores…
¿soy yo? ¿por qué yo?
el amor desconcierta.  impide pensar correctamente.
es un estado salvaje.
me recluyo entre los frutos que paladeás. la pulpa de tus brazos. estamos atravesados. insertos.
has dicho tanto.

5
ahora savia dulce. chorreás.
te encanta comer mangos helados con chile. el verano.
yo soy templada. no heredé la sangre caliente de los perros. no es mi genética. pero quiero cambiar.
necesito comer lo que vos comés. y el temblor del hielo deshaciéndose, el rechinar de tus dientes cuando reís. necesito comprender tu naturaleza.
o una especie de dominación.

6
planificás mi búsqueda.
estás decidido a probar equinoccios opuestos. cómo aman los seres diferentes.
tengo la epidermis de las blancas. olor de los vegetales que esparzo. te parezco, en esta frialdad, bella.
buscás. las caderas a la intemperie. los senos llenos de fibras, de vos hacia el pezón. un extremo que succiona arde y contraría.
entonces la distancia, conversión de la nada.
contra la madera los fuegos del invierno. los alcoholes. su lucha para no morir.
tiempo, un objeto inservible que abandonamos.
decidimos salvar las sombras. corregir la elipsis.


Carlos Gallegos


Carlos Gallegos


(Buenos Aires, 1966) Publicó en el 2002 “Otras Realidades, homenaje a Jacobo Fijman” Ediciones Araucaria, en el 2010 “HospitalPsiquiátrico” Ediciones La Mariposa y La Iguana, en el 2012 “Hospital Público” Ediciones ArbolAnimal, en 2013 “Dios me dio la bendición de ser ateo” edición conjunta Soquete Terrorista y ArbolAnimal, en 2014 “Animales Sueltos y Otros Males” ediciones ArbolAnimal, el 2015 “Autorretratos, álter ego” Ediciones ArbolAnimal.


Sus libros “Dios me dio la bendición de ser ateo” y “Animales Sueltos y Otras Males” fueron editados en Chile por Ediciones Periféricas en 2013 y 2014 correlativamente.
Desde 2011 dirige la Editorial ArbolAnimal.
contacto: arbolanimal@yahoo.com.ar

Anna Pinotti



Anna Pinotti.    

Montevideo, Uruguay, 1973. A los 23 años se muda a Buenos Aires con la intención de desarrollar su escritura. Realiza taller con María del Carmen Colombo, Osvaldo Bossi, alter Cassara. Obtiene la Beca Antorchas.

Tiene publicado:
Cataratas, Córdoba, Argentina, Colección El Don Vedado, Editorial Yügen, 2004.
Para el orden de la orden, Buenos Aires, Argentina, Ediciones la mariposa y la iguana, 2013.
Qué cuerpo para qué momento, Buenos Aires, Argentina, Colección de ensayos praxis, Ediciones la mariposa y la iguana, 2013.
De mala gana, Ediciones La mariposa y a iguana, 2015

Actualmente, lleva adelante el Ciclo Malverso de Lecturas, junto a Laura Suarez, que tiene un formato web en Facebook, donde diariamente se comparte el trabajo de un poeta por semana, y un espacio de lectura presencial, y coordina un taller de investigación y experimentación poética en la ciudad de La Plata donde reside.
*

Sobre su experiencia de escritura dice, para la revista virtual El infinito viajar:

"Cada libro ha propuesto una fórmula, y ésta fórmula ha evidenciado el procedimiento. Si bien no sigo pautas concisas hay disparadores que utilizo mientras escribo, me interesa la intervención caprichosa del afuera, (la radio o la tv) como si esas voces estuvieran en un espacio material accesible que evidencian la intensión del diálogo, esta provocación busca asirme al suelo, a la actualidad. Trato de ser permeable al discurso que me rodea, busco que mi poesía de cuenta del tiempo en el que es escrita. Es una manera de contar la historia..."





"Puedo abortar sin desangrarme. 
La escenografía es gris con el horizonte intenso cuando la corriente arrastra mucho más de lo que muestra la superficie. 
Freno pegada al cordón. Dejo que pasen." 
"Inhumana./Festejo atrás del verbo las partes y la/ diferencia de género que no genero"



La forma de lo que limita cambia con el impacto. El cuerpo se debate y se revela en sus orificios. Como un orden que se carga y se descarga, esos poemas arremeten contra los vidrios tras los cuales los humanos duermen, licenciados como dios.
Andrea López Kosak


   "Al medio. Entre los ojos." 


Una constante recorre el nuevo libro de Anna Pinotti: eso que no termina de nombrarse ni de escribirse, eso que se instala de a ratos en la ausencia,  que apunta y hace agujero.  Dos disparos certeros hacen de un hueco dos. Dos agujeros. En un vidrio a fondo negro. En tapa y como para arrancar (...)
Andrea Pineda




De mala gana

"Para empezar, me gustaría comentar lo cerca que estoy de Anna en este libro, no sólo porque originé el diseño de la portada, sino también porque en este trabajo hay una idea central que respaldo completamente y es la noción de dominación y sus consecuencias.

Y es que habitamos un mundo poblado de proyectos ajenos, unos en acción y otros cristalizados en artilugios que han sido significados y manufacturados por otros, que además de imprimirlos en el cuerpo de las cosas, han fijado culturalmente sus reglas de uso: suba, baje, espere el cambio de luz, corte por la línea de puntos, lea cuidadosamente las instrucciones...,pero también: compre; venda; gane; deposite aquí su dinero; llene la solicitud con letra mayúscula; no insista, no hay vacantes...;y con demasiada frecuencia: calle, afloje, baje la cabeza… Un extrañamiento ominoso que De Mala Ganalleva al extremo.

Por cierto no crean que la originalidad de De Mala Gana consista en evidenciar la sumisión. La historia de la literatura nos dijo mucho sobre luchas contra estados de cosas que eran potentes, ofensivos o aplastantes. El desafió es preguntarnos en qué medida hemos incorporado a nuestras mentes la imposibilidad de hacer algo distinto. "
María Laura Suarez

"Un concierto sostenido con un único instrumento, que no es. Palabras que caen produciendo sonido, articulando el ritmo del cuerpo de mala gana, tensando, aflojando, más, contra las cuerdas. Cuerpo cóncavo que al ser golpeado anuncia, convoca. Una convocatoria de sentido, concertación, negociación que falla. Sentido que se fuga en grito animal. La campana es el antiguo alarido de ese prójimo que pone de manifiesto el engaño del orden mismo."
Andrea López Kosak

*
Para dejar por un lado
Y por el otro
En claro
Los espacios necesarios donde sostener el aliento
Sin agitar de más
Primero lo primero después
Lo otro
Siguiendo los pasos sin perderse
De la mayoría
Que ha resuelto no pensar en los detalles
Me pareció escuchar
Esa letra que sabía a otra
Cada vez más grave
Hasta el cuello
Hasta las manos quedaron pegadas
Del contexto
Dadas las pretensiones
Del menú

Propia
De una estrategia
Al menos hasta ahora no reconocida
Por el ímpetu del escriba o
La incómoda realidad de encontrar
Menos
Que más
Acordes a los acordes
Acorde
A los reclamos de la orquesta
Que resisten las proezas al borde del escenario
Conectados
Al mismo transformador y sin embargo
No es la razón
Lo que confiere seriedad y formalidad a la cuestión sino
El tono
Cuanto menos más
Escuché
Y me detuve ante la oferta la
Negociación del mismo lado prometía
Una consecutiva relación de hechos
Por descarte
O redistribución
Y dejé de inmediato ese lugar por otro
Para otro momento en otro
Estante el estandarte tembló y yo de pié
Haciendo fuerza
Contrapeso contra
Natura
Como dios 

Desde la raíz hasta las uñas
Fue creciendo esa habilidad para revelar
Por no faltar a un acuerdo
De partes
Sólo lo necesario
Para crear un clima
Dijo lo dicho ha pedido
Y no volverá
A repetirlo por éste medio o mitad
Insignificante
Fuera del marco de moda de la moda
Actual
Y mañana
Dijo
Es una decisión apresurada hablar
Dadas las condiciones
Me retiro de la escena sin crimen
Sin haber podido.

*


Interiores -poetas del país, un adiós a Inés Manzano y Cayetano Guzmán





Inés nos había encargado una plaquette con los poemas de Cayetano Guzmán que quería presentar en el Interiores de mayo pasado y regalar. Para los que no lo conocieron, Cayetano, fue el poeta con quien armó Interiores y la acompañó en los primero años, hasta que falleció. Lamentablemente no llegó a realizarlo.
La idea es cumplir con su deseo. Junto con la presentación de la plaquette haremos un homenaje a Inés Manzano y la despedida del ciclo, un cierre de esta etapa.

Invitamos a todos los poetas y amigos a acercarse este 9 de julio a la Biblioteca Popular "José Ingenieros" (Velazco 958) a las 18 hs y compartir la poesía de Inés Manzano y Cayetano Guzmán.
Así como a hacer un cierre de ese hermoso y fundamental ciclo que nos acercó a los poetas y la poesía de todos los puntos del país y que no hubiéramos conocido de otra forma.

*

INTERIORES -poetas del país, funcionó en la ciudad de Buenos Aires desde el año 2002 a comienzos del 2016. Fue fundado por Inés Manzano y Cayetano Guzmán. Su objetivo era difundir, en la ciudad de Buenos Aires, las distintas poéticas que se dan en el país, y a las que no tenemos acceso. 
Los encuentros fueron, en su gran mayoría, de abril a diciembre, en la Biblioteca Popular José Ingenieros, de Villa Crespo, los primeros sábados del mes (salvo excepciones), a las 18 hs.
Se invitaba a un poeta por mes, tratando de que estén representadas distintas provincias a lo largo del año, y se convocaba a un poeta local que leyera la obra del poeta invitado y realizara una entrevista.
Cada encuentro comenzaba con una charla-presentación con el invitado, donde se indagaba sobre su obra, sobre las condiciones de producción de la misma en su lugar de residencia y sobre las diversas actividades poéticas que allí se realizan. Luego el poeta leía sus textos y dialogaba con el público. 
Inés confeccionaba un tríptico con poemas del invitado para entregar en cada encuentro y, para difundirlo, elaboraba un afiche con obras de artistas plásticos o fotógrafos, en lo posible, argentinos. 
De la misma manera (desarrollo del encuentro, tríptico y afiche), funcionaba INTERIORES -poetas de Latinoamérica-, adonde invitaba a participar a poetas del resto de Latinoamérica que se encontraban de paso por Buenos Aires.

*

Inés Manzano


Inés Manzano Nació un 8 de julio en Buenos Aires, donde falleció el 16 de abril del 2016.
Tuvo dos hijas, Ana y Eva.
Fue poeta, maestra y bibliotecaria.
Organizó, desde el 2002 al 2016, los Ciclos de Poesía:
INTERIORES -poetas del país-, cuyo objetivo era difundir, en la Ciudad de Buenos Aires, las diversas poéticas que se dan en el país; e INTERIORES -poetas de Latinoamérica-, donde se invita a poetas del resto de Latinoamérica, que se encuentran de paso por la ciudad.
Fue miembro de «Poesía en la Escuela» y de la «Red Federal de Poesía».
Integró el grupo que organiza el Festival Internacional de Poesía en el Centro (Centro Cultural de la Cooperación).
Coordinó, junto a Lidia Rocha, el taller literario gratuito «El tren de la palabra», de lectura y escritura de poesía.
Publicó el libro de poemas: Si es puñal que me mate. Rosario, Papeles de Boulevard, 2011.


*



La victoria de la víspera


Este contorno
Inés Manzano, Enrique Butti
[ph: Cata Boccardo]

que la distancia desmenuza
ni aún remotamente se parece
al perfil de la victoria
perseguida en los sueños
pero guarda
un parentesco secreto
con el rostro descarado
de una muchacha en La Matanza
en Samotracia
con los dedos en V

Bien que somos porfiados

Amanece
y la distancia nos pisa los talones

Ignora
que al contrario de Aquiles
en ellos reside nuestra gracia

-alas robadas a los dioses-

Indefensos y frágiles sabemos
que el único suceso que nos torna invencibles
es tenernos a mano
Inés Manzano, Vivi Abnur, Urretabizkaya


Nos bebemos el mar
y la distancia
se muda en filigrana
traspasada de barcos

Va cayendo en mi boca mientras digo

que yo me la devorocomo una jabalina vence
la copa de los árboles

De este modo burlada
no puede con nosotros

Bien que somos porfiados
Poderosos

Se deshace en el agua

*
Inés Manzano

Que alguien me libre
del gesto disciplinado del bonsái
que se acurruca
para no herir el aura
que rodea su frente

Que alguien me libre
del rigor de ser hija de los dioses
sacrificada
MIguel Naón, Inés Manzano

por hacerse a la idea
del dedo que la asfixia

Que alguien me libre
de buscar la redención en el silencio
Que mis manos desconozcan
el orden que me obliga

Que alguien me libre
de agachar la cabeza para ser coronada

Yo tengo la avaricia del lenguaje

*

La libertad consiste en los fragmentos

Cada tribu guardaba los huesitos
de Tupac Amaru
empujados por el viento

el ojo
preso
del derrotero de la flecha

pero el alma
liberta

Ahora mismo
la cabeza que se propone el vuelo
batalla con el pie que se lo impide

se arranca de cuajo
si es preciso

y vuela

de todos modos

vuela

* *
Cayetano Guzmán, Rogelio Ramos Signes, Inés Manzano, Paulina Vinderman
      


Cayetano Guzmán nació en Buga -Valle de Cauca- Colombia, en 1957. Vivió en Argentina desde 1979 donde fallece en agosto del 2014. Mecha, Vicky y Tomás, sus tres amores.
Durante casi todos los sábados de 2001, en un barcito frente a una plaza de Palermo Viejo, soñó con proyectos vinculados a la Poesía. El sueño se hizo carne en junio de 2002, en Interiores -poetas del país- ciclo del que fue uno de los fundadores, junto a Inés Manzano, y al que siguió sosteniendo durante muchos años.
Colaboró con el taller «El tren de la palabra», gracias a su esfuerzo se editaron varias plaquettes con poemas de los participantes.
Sus poemas los publicó Alejandro Schmidt el 11 de junio de 2009, en el blog «Romanticismo y Verdad».
Inés Manzano decía que Cayetano «hacía música cuando hablaba».


Este 9 de julio, a las 18 hs, en la Biblioteca Popular José Ingenieros (Velazco 958) vamos a estar recordándolo, a él y a la querida poeta Inés Manzano, en la despedida de Interiores -poetas del país.

(El retrato lo realizó Ariel Muñoz.)

Fragmentos

I

espacios que dejan los recuerdos
entre la lluvia que cae
y un viernes
con la noticia del hombre de negro y sombrero
en el campo santo:
casi el fin de toda la niñez;
despertar a la ruidosa calle diez
y a los objetos que se van por las noches
y al calor que sofoca la cama y el sueño

III

volver sobre lo escrito en la memoria
de héroes que riñen y se matan
por una patria desteñida
en colores de la muerte por todos

XII

Algo cambia en el camino contrario a la mirada del /horizonte
la línea que se quiebra en fondo, hondo, profundo, hundo,
/herrumbro
Y los héroes ya no están para salvar
Son sólo héroes perdidos en la sangre
de todos






Soledad Gómez Novaro

Nació en Buenos Aires en 1970.

Estudió la carrera de Letras y se desempeña como docente. Participó en talleres y espectáculos de narración oral. Actualmente se dedica a explorar posibilidades creativas en la escritura.

Junto con otros autores, integró las antologías de poesía y narrativa: Y no ilumines los rincones (La Mariposa y la Iguana, 2015) y Tal vez debería yo hablar del fuego, sólo del fuego (La Mariposa y la Iguana, 2012).

Publicó Piezas Crudas, prosa poética con tintas de Perla Marulies (La Mariposa y la Iguana, 2014) y Dentelladas (La Mariposa y la Iguana, 2016).

Aquí Soledad en: "El infinito viajar", revista de arte y poesía



Dentelladas
 Dice, Paula Jiménez España:
Me resulta inevitable pensar en Piezas crudas, el libro anterior de Soledad Gómez Novaro, a la hora de referirme a Dentelladas. No porque necesite compararlos, son dos obras independientes e igualmente disfrutables, sino porque creo que hay una continuidad entre ambos, una ligazón. En aquél libro, lo crudo irrumpió con toda su fuerza, y con él, el escape del animal encerrado, el acecho de lo instintivo sobre el lenguaje, el gran domesticado. Aquél fue el gesto inicial, el de arranque, cuya fuerza reveló una identidad literaria que surgía con gran poder en la pluma de Soledad. Cierta desesperación tenía ese texto, propia de ese animal que de golpe salía a morder, a morir o a matar. A escribir. En Dentelladas, no se presiente esa desesperación, sino el tanteo de sus patas sobre la tierra firme, la exploración del cuerpo en la materia del lenguaje. El animal ya salió. Ahora se prueba moviéndose en un mundo que lo desorienta, donde cada cosa puede ser otra, una casa puede ser él, ella, que a su vez puede ser un arabesco, que a su vez podría ser viento, nada....

Aquí el texto completo:
http://edicioneslamariposaylaiguana.blogspot.com.ar/…/proxi…

[Fragmentos de Dentelladas]
“No seas.
No pronuncies las púas, los vidrios rotos, los baldíos, la empalizada, los pies descalzos.
No seas.
No cuentes la sarna y la lluvia, las costras, el pan duro.
No seas.
No digas en la fiesta el alambre crudo, o el borde, o el afuera y la ropa descosida.
No seas.
No grites los perros flacos, el agua sucia, los días helados.”
Paula Jiménez España y Soledad Gómez Novaro
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"Yo fui casa sin jardín, por las espinas. Adentro dormían las leonas, siempre detrás de las rejas. Y yo me deshabitaba..."
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"Yo fui casa-lejos, casa-jaula con leonas adentro..."
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"Me era fácil esconder los arabescos y vagar por ahí, descalza, hasta el alambrado..."
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"Si me iba algo se haría trizas y heridas y costras y llagas.Se haría trizas el mundo en la pared y los ojos-pájaro volando en el cielo de estuco y de cal...."


Piezas Crudas

Piezas Crudas
[Fragmentos]

«Se soltó», digo al cruzar la calle o en el ascensor, y me mira una mujer, y finjo, por absurdo que parezca, no haber sido yo quien dijo esa frase que, como el animal, se soltó.
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Estoy incrustada en la tierra, el pasto me hace cosquillas en la frente y viene el animal. La tierra tibia me adormece, me sostiene y me deshace. Me hago tierra en la tierra. Y viene el animal, las patas blandas, calientes, las garras escondidas. Siente la tierra húmeda entre los dedos y mira los charcos luminosos en la noche. Los charcos que sostengo con las manos, con los brazos y la tierra que ahora soy. Se posa el animal y le siento el calor del vientre a través del pelo, a través del pasto. Se recuesta y gira, mueve las patas. Apoyado sobre el lomo se frota la nuca poderosa con las hojas. Su pelaje corto, negro me cepilla con infinitas agujas sedosas hasta que se distrae y se olvida de su juego para echarse sobre mí. Abandonados los labios también negros, lisos, lustrosos. El colmillo asoma en la boca tierna del animal dormido, pesado, incrustado ya sobre la tierra, con el pasto haciéndole cosquillas al testuz. Y lo sostiene, lo adormece, lo deshace la tierra, se hace tierra el animal, tierra que soy yo, que soy el animal.
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Intensidad y delicadeza. Como quien traduce con una pluma finísima el grito de una bestia, así Soledad Gómez Novaro le da voz al animal. El animal, que en este texto funciona como una categoría zoológica en sí misma, como el habitante de un reino sin otro nombre que el que dan el hambre, la garra, la urgencia de libertad. Con sus cuatro patas, su pelaje sucio, los ojos brillantes, se desliza por las páginas de Piezas crudas y mata. Metáfora del instinto vital reprimido por la sofisticación intelectual, la criatura inventada por Gómez Novaro es su manera de sacar afuera lo indomable, propio y reconocible. «El colmillo asoma en la boca tierna del animal dormido (…). Y lo sostiene, lo adormece, lo deshace la tierra, se hace tierra el animal, tierra que soy yo, que soy el animal», dice la autora. Pero no es inocente y se erige también en la guardiana que vela por su encierro y la que lo deja ir: «Se soltó», digo al cruzar la calle o en el ascensor, y me mira una mujer, y finjo, por absurdo que parezca, no haber sido yo quien dijo esa frase que, como el animal, se soltó». Palabra animal, entonces, la poesía. Literatura capaz de destejer la trama defensiva del lenguaje correcto que ata y encadena. Garra que raja el cuero de la estructura y la convención. Pero literatura al fin, está obligada a pedir socorro a esa herramienta de domesticación del espíritu que es la palabra. Contradicción, dicción  de dos cosas al mismo tiempo, que es la base de este maravilloso texto que encontró en las tintas de Perla Margulies su compañía perfecta. Esas criaturas blanquinegras, insinuadas y bestiales, que Margulies plasma sobre  fondos  de una escritura cursiva indescifrable, parecen sintetizar el espíritu crudo de estas piezas breves y concentradas, con lo que tienen de bello y lo que tienen de terribles. 

Paula Jiménez España
Buenos Aires, octubre de 2013

Destellos del alma animal
[sobre las tintas de Perla Margulies]

La escucha del canto, la irrupción de una voz autónoma y certera que se expresa desde lo ignoto sería, para Joseph Campbell, la primera señal del don chamánico. Por medio de ella, un animal traduce su presencia y toma forma humana para derramarse a través de la melodía. 
La belleza visual de este pequeño volumen nos incita a añadir al poder de los artistas en su función chamánica, el don del dibujo. Valiéndose de éste, a través del manejo de tintas, plumas y pinceles, Perla Margulies recrea el poder de la bestia con visiones sutiles y viscerales, yendo al encuentro de lo que James Hillman revela como nuestra «alma animal». Mediante imágenes que desnudan erizamientos y delicias; trazando líneas y texturas hipnóticas, sugiere tormentos e imbricaciones que completan las palabras, sin subordinárseles en lo absoluto. 
Como creadora, nos invita a acompañarla en la inquietante búsqueda del resabio inconsciente de lo crudo, supuestamente enterrado en el cemento de nuestra pesada urbanidad o hundido en la ciénaga de sus formalidades inútiles.
Cecilia Casamajor
Buenos Aires, noviembre de 2013


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